martes, 21 de enero de 2014
martes, 7 de enero de 2014
Hay una cabina en alguna parte de tu
organismo,
sonando con la última llamada que pude
hacerte
desde el otro lado de mi vida,
con la primera moneda que gane
escribiendo,
a la única dueña de este universo de
papel,
invierno de tinta.
Y si alguien se encuentra en tu piel
el rastro de mis retransmisiones más
profundas,
diles que son de un hombre que no te
dejaría perder,
diles que midan en la inmensidad de una huella mía
si estan hechos para recorrer tal
distancia,
a la que yo te lleve, y que salten
lejos
de ese tren si no puede traerte un
paisaje:
más amplio, mas limpio, mas puro...
Suscribirse a:
Entradas (Atom)