viernes, 26 de marzo de 2010

Silenciosa Dolencia.

Un día la herida avanza demasiado
y se rompe en mil de pedazos
una parte inestimable e irrecuperable,
de tu alma más profundo.

Que infinita desgracia porque la infancia
no vuelve a recuperarse,
y un día deja de dolerte, para siempre...

Te mueres un poco, y no volverás a formar parte
de ti mismo,del todo, habitando otro cuerpo,
otra vida, que aún parece pertenecerte,
pero en realidad estarás encerrado,
respirando en tu propia muerte.

2 comentarios: