Etérea Texto

.Etérea.Fotografía Conceptual. Expisoción de la Exposición por Z.Sebastian


El éter es un fluido intangible que se cree ocupa todos los espacios vacíos.
Para la ciencia antigua era una sustancia desconocida, esa no materia que ocupa todos los espacios que no son materia. También conocido como quinta esencia, se considera el canle o hilo conductor imaginario que une el gran organismo de la creación: el universo.
Algunas teorías lo definen como el quinto elemento y el más sutil de los cinco, del que nace todo, a él se le atribuye la cualidad de ser el encargado de provocar que la energía se transforme, como si él tuviera la voluntad que hace que los otros cuatro elementos se mezclen e interactúen definiendo la creación.

Muchas filosofías y culturas antiguas usaban los 4 elementos, arquetípicos clásicos para explicar los patrones y comportamientos de la naturaleza, refiriéndose en este contexto al estado en el que la materia se manifiesta.
Los 4 estados de la forma.
( sólido/tierra, líquido/agua, gas/aire, plasma/fuego)

Por medio de los elementos se busca representar la íntima relación de la mujer con la naturaleza, resaltando la figura femenina como creadora, como genero sobre el cual recae la función mas importante de la vida: engendrar y ser madre, y por lo tanto la complicidad que eso supone entre la mujer (como hecho natural ) y la propia naturaleza.


Etérea es la mujer retratada que con su desnudez representa el espacio en blanco para que la vida se desarrolle, la textura madre o éter. El simbolismo de la piel también se utiliza por su poder inocente, suave, para entregar dócilmente la belleza en formas y conceptos. Las imágenes proyectadas que se van pintando sobre la mujer hacen referencia directa a los 4 arquetípicos (o elementos) y al carácter psicológico que se manifiestan en las cualidades, emociones o rasgos de la fotografía.

Las posturas entre las que destacamos: Posiciones fetales que remarcan otra vez la importancia de la naturaleza y el poder intimo, la condición de entrega inocente. Otras nos sugieren receptividad y relajación que nos dan a entender que la forma de mantenerse en equilibrio, es por medio de la templanza y meditación, las posturas de latencia justo antes de la floración encarnan las metamorfosis que sufrimos para afrontar la vida, y podemos reconocer algunas que imitan a una célula, por ejemplo, que nos hablan una vez mas de ese molde natural, de la simpleza magistral de lo realmente originario. Hay imágenes que encarnan un trance psicodélico y llaman a una consciencia superior, a una retroinspección profunda y detallada, para acercarnos a quien en verdad somos y mantenernos en continuo contacto interior con las verdades humanas, en armonía perfecta con nuestro medio.



Esta exposición pretende que el espectador sienta el éter, o quinta esencia, vinculo sagrado entre los cuatro elementos, las cuatro direcciones o puntos cardinales, las cuatro estaciones… Uniendo con su vista y movimiento las fotografías, significados y sensaciones podría experimentar en su propia carne la relación del todo con el todo, una pequeña paradoja que nos toca, quizá para llamar nuestra mejor atención.




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Texto que acompaña a las fotografias una vez orientadas por grupos entre las cuatro direcciones y en relación con los elementos
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El SUR, dirección que marca el crecimiento y la fructificación… AGUA, el elemento del que emana la vida, que limpia y refresca, que hace crecer y da vitalidad, el elemento de las emociones y los sentimientos. Un 80% de nuestro cuerpo.

El NORTE, dirección de la renovación, el conocimiento, la sabiduría... AIRE, el elemento del aliento, de la palabra y de la música, de la luz, el color, el perfume, es el elemento que contiene los pensamientos y las ideas… la creatividad.

El ESTE, dirección de lo nuevo, de los comienzos y del nacimiento… FUEGO, el elemento de la iluminación y el esclarecimiento, de la purificación y de la salud,
Este elemento contiene la fuerza del espíritu, la pasión y la acción.

El OESTE, dirección de la madurez, de la cosecha y las recompensas… TIERRA, el elemento de lo interior, de lo misterioso y lo secreto, de todo lo que muere para nacer, este elemento contiene en si la belleza e intensidad del cambio, la firmeza y la vida.
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