domingo, 6 de junio de 2010

Maldita Fricción

Una Lluvia oscura y molecular de ti: mi piel,
para calmar la sed de venganza: soledad de este ser.
Un torrente subacuático que me aprieta fuerte,
tu vicio: mi rencor.
Tú, cobertura perdida, onda inflamable
ultramagnética, pero vacía,
tú que recoges mi ceniza antes de que se pose
en el aire y yo, que como ruído en la oscuridad
me deplazo fluorescente, con pies inútiles de gato
y me siento inevitablemente torpe.
Me miras, como una sustancia sutil y hermafrodita,
tú que atrapas al presente y haces un cuadro de mis tripas,
proyectado en mi mente, abstracto.
Yo, que me escapo siempre antes de caer redondo a tus encantos,
omnipresente violencia: dejarte o dejarme, besar el suelo,
dejarte: la única forma en la que te poseo.

2 comentarios: